Ahora mis poemas se adornan
de un ¿por que?
Y las palabras que escribo
dotena como ubna especie de canto
al mundo
las tejas de mi techo se han vuelto
chapoteadero
para aves vagas y sedientas
Sobre ese libro viejo
reposa el alma y el cielo
azul para los que duermen en una
lapida repleta de recuerdos e insectos
Quien, quien llora
en el llanto de la humanidad
o quien duerme mientras la luna
camina herida sobre un mar de deseos
flotantes
Ya la locura me toma de las manos
y me muestra el camino de lo desconocido
mi madre con su mirada
apresurada me recita sus sueños
convertidos en mis pesadillas
que naufragan de agua
en este canto a la noche lucho
Maldito el momento, el lugar,
y la hora donde murieron
las lagrimas de un sol sediento
que hoy caen sobre nosotro
Y
sin embargo quisieras
ser rosa o talvez
flor para marchitarte y volver a nacer...
Rodolfo Arciniegas (fito)
